Huele a fresa, donde estoy el tacto es de piel sintética, la fresa viene de mí, pero también me viene un olor a hierba, cual desconozco.
Siento unos dedos fríos que están toqueteando mi corazón, veo una silueta oscura frente a mí, y hay una televisión encendida con algún programa del corazón. Curiosa semejanza, pues alguien desconocido ha introducido su mano en mi interior hasta llegar a mi órgano más importante y comenzar a jugar con él. Mientras oigo las estúpidas criticas de gente que no me importa lo más mínimo.
Veo que se aferra a mí, su respiración es muy agitada. Me araña, me muerde y me desgarra por dentro.
Huelo a fresa, donde estoy el tacto es piel sintética, la fresa soy yo, él huele a hierba. Él toquetea mi corazón, mientras oigo criticas de gente que no me importa lo más mínimo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario