miércoles, 6 de octubre de 2010

Mi dulce amor.

Y yo cada día muero un poco más,por tenerte y no ser así a la vez,quisiera poder describirlo de una forma metafórica para que pareciese bello este sufrimiento,pero no puedo,porque aún no sé hacerlo.Aprenderé,para decirte de una forma que tú no entiendas que te quiero con todo mi corazón,para que así no te enfades conmigo.
A veces creo o pienso,no sé...Que me quiere,pero que no deseas estar conmigo,no entiendo por qué,pero no remediar tu forma de pensar...
Quiero poder ver tu dulce rostro de adulto pero con un niño dentro,más bien dicho deseo,¡Poder tocar tu  cuerpo desnudo al menos cinco de siete días qué tiene la semana!,eres un dulce ángel con las alas cortadas que calló ante mí,de pie y sin rechistar que me observó detenidamente,y se digno a hablarme con una dulce sonrisa en la cara,y supo que desde aquel instante comenzó a hacerme la mujer más feliz y triste de el mundo entero.

Sé que nunca estaré contigo cómo yo deseo estar,pero sí sabré a pesar de que no lo digas,que me quieres y deseas,quizás no tanto cómo yo a ti,pero algo sí es así,y lo sé.

Antes de desaparecer de tu vida,intentare escribirte algo bonito y dulce que describa a la perfección todo lo que siento por ti,que es mucho,pero lo haré de tal forma,que cuando lo leas te haga salir de la tierra y te lleve al cielo,que es dónde tú,mi dulce ángel amado debes estar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario